Por: Roberto Urrea P.
El 24 de abril será un día histórico para el Canotaje colombiano, que por primera vez tendrá una representante en los Juegos Olímpicos París 2024.
Manuela Gómez Sánchez, deportista del Peñol, fue la encargada de alcanzar este logro para el deporte colombiano, tras el clasificatorio Las Américas que se llevó a cabo en Sarasota, Florida, Estados Unidos.
La deportista del Oriente Antioqueño, se adjudicó la medalla de plata con un registro de 49.744 segundos, detrás de la brasileña Valdenice Conciencao, quien obtuvo la presea dorada con un registro de 47.734 segundos.
La Prensa Oriente, localizó en Estados Unidos a Manuela Gómez Sánchez, con quien se dialogó sobre esta experiencia que la catapulta, como deportista de alto rendimiento.
Clasificación a Los Olímpicos: “Este ha sido un proceso que no se logra de un día para otro. Yo vengo preparándome desde el año 2014 en el Canotaje. Pero ya en el alto rendimiento deportivo inició en el 2018, que comencé a integrar la selección Colombia. Ha sido un trabajo muy duro en las competencias del ciclo olímpico, en donde siempre tratamos de conseguir esta tan anhelada conquista”.
Carrera: “Lo que he vivido estos días han sido momentos inolvidables para mí. La competencia “Las Américas de Canotaje», se ha constituido en la más importante en toda mi carrera deportiva. Fueron 49 segundos en los cuales tenía claro que tenía que salir a remar y llegar hasta el final, y afortunadamente lo pude hacer y me siento orgullosa de eso”.
París: “Esto es histórico para el canotaje colombiano. Este deporte en Colombia no ha sido muy reconocido y por eso no ha tenido mucho apoyo, esta es la razón por la cual no hemos realizado verdaderos procesos. Esperamos que con el apoyo que nos puedan brindar de aquí en adelante, podamos escribir una nueva historia en el canotaje de nuestro país. Para eso me voy a seguir preparando, para hacer una buena actuación en estos juegos”.
El Peñol: “Yo salí de la vereda la Magdalena desde los 15 años. Este deporte lo practico desde los 14 cuando me desplacé con mi abuelo al municipio de El Peñol, para poder viajar a entrenar y a estudiar. Todos saben que en las montañas las oportunidades son escasas, en donde no se cuenta con las mejores herramientas para uno poder soñar con estos logros. El destino nos ha enseñado que hay que luchar porque el que persevera alcanza”.
