Después de casi un año de recuperación y rehabilitación, un búho de anteojos (Pulsatrix perspicillata), desplegó sus alas para volar nuevamente libre en las montañas del suroeste antioqueño. Este logro fue el resultado del trabajo articulado entre Cornare y Corantioquia, dos autoridades ambientales que decidieron unir esfuerzos para que el proceso fuera exitoso de comienzo a fin.
En febrero de 2023 el búho fue hallado sobre una vía del suroeste de Antioquia sin poder volar, situación que fue reportada por la Policía Nacional a la línea de atención de fauna silvestre de Corantioquia; desde allí, se desplazó un equipo técnico especializado que concluyó que se trataba de un Pulsatrix perspicillata; un búho de anteojos, juvenil, de buena condición corporal, activo y alerta.
El animal silvestre fue trasladado al Hogar de Paso de Corantioquia, donde recibió atención médico veterinaria, biológica y zootécnica; se le suministró una dieta acorde a su especie, suplementada con vitaminas y probióticos, pero se identificó que no tenía un desarrollo completo de su plumaje, motivo que le impedía volar.
Gracias a la buena relación interinstitucional entre autoridades ambientales, el individuo fue entregado a Cornare en julio del 2023, para iniciar su proceso de rehabilitación en actividades de refuerzo de vuelo.
Camilo Muñoz, médico veterinario y coordinador del Centro de Atención y Valoración de Fauna Silvestre de Cornare, explicó que en el CAV de esta Corporación “contamos con una jaula especializada para la rehabilitación de aves rapaces, que está diseñada para que estos individuos desarrollen habilidades, tanto de vuelo como de caza, necesarias para poder vivir en libertad”.
Adicional a ello, explica que al individuo se le realizó un implante de vuelo, “que consiste en adherir plumas de un paciente donante en un paciente receptor, esto permite que los individuos tengan todas sus capacidades y buenas condiciones en su plumaje para su adecuado proceso de rehabilitación”, relató Camilo Muñoz.
Una vez este Pulsatrix perspicillata demostró que estaba listo para regresar a su hábitat natural, Cornare lo entregó de nuevo a Corantioquia para que lo liberara en una zona en la cual pudiera cumplir con sus funciones biológicas.
La liberación se realizó en una de las plataformas de liberación del Programa de Predios Reubicadores de la Sociedad Civil de Corantioquia. El predio se encuentra ubicado en el suroeste del departamento, de donde es procedente el animal. Este hábitat cuenta con las condiciones de conservación y los recursos alimenticios y de refugio para que el animal se pueda establecer satisfactoriamente allí, informa Jairo Martínez, biólogo de liberación y monitoreo de fauna del convenio entre Corantioquia y la Cooperativa Precoodes.
Unión de autoridades ambientales
Gracias a la buena relación interinstitucional entre autoridades ambientales, conjuntamente, Corantioquia y Cornare han podido rehabilitar 32 animales silvestres, víctimas del tráfico y la tenencia ilegal. En el 2022 fueron 19 individuos de las especies titís gris (Saguinus leucopus), sinsote (Mimus gilvus), sirirí (Tyrannus melancholicus), carriquí de montaña (Cyanocorax yncas), gallinazo negro (Coragyps atratus), ocelote (Leopardus tigrinus), búho real (Bubo virginianus), mirla patinaranja (Turdus fuscater) y turpial montañero (Icterus chrysater). En el 2023 fueron 13 individuos de dos especies, búho de anteojos (Pulsatrix perspicillata) y currucutús (Megascops choliba).
Sobre esta especie
El búho de anteojos, Pulsatrix perspicillata, vive cerca del agua en selvas tropicales y bosques. Es una especie que se distribuye en el centro y sur del continente americano; se puede encontrar solitaria o en pareja y su alimentación está basada principalmente en pequeños vertebrados, mamíferos, reptiles y anfibios, por lo que son considerados controladores de plagas, manteniendo el equilibrio en el ecosistema.