Leyendo: De esto hablamos, viejo

De esto hablamos, viejo

Juan Sebastián Gómez
jusegoma12@gmail.com

Hace aproximadamente dos meses, cuando el tema del momento era la muerte de 8 menores durante un bombardeo militar en Caquetá, operación que buscaba acabar con un grupo disidente de las Farc y la moción de censura al ahora ex ministro de Defensa Guillermo Botero, un periodista del diario El Heraldo durante un evento en la ciudad de Barranquilla, se le acercó al presidente Iván Duque y le preguntó “¿qué opinión le merece el bombardeo en el Caquetá?” y posteriormente al no responder, agregar, “presidente, el bombardeo qué pasó con eso?”, el mandatario nacional respondió: “¿de qué me hablas, viejo?”.

La evasiva respuesta del máximo mandatario quedó registrada en video y esta no tardó en hacerse tendencia en redes sociales, donde el numeral #DeQueMeHablasViejo fue utilizado por miles de colombianos para recordarle los actuales problemas del país durante su gobierno; y luego de 60 días, en paralelo a los movimientos del paro nacional iniciado el 21 de noviembre, se leen frases dando respuesta como: «de la tasa más alta de desempleo», «de la corrupción», «de los niños asesinados», «de los falsos positivos», “de los líderes sociales, indígenas y reincorporados asesinados”, “del posconflicto”, “del desconocimiento de la JEP», “de su actuar pusilánime con el periodismo”, “de la salida del aire de Noticias UNO, “del incumplimiento de los acuerdos de Fecode, estudiantes, profesores, comunidades LGTBI”, “ del abuso de poder y represión del Esmad”, “de la muerte de Dylan Cruz”, “de la reforma laboral y tributaria”, “del holding financiero”, “ del 70 % de desaprobación de su gobierno“, entre otras.

El sentimiento de repudio por la manera como se está gobernando este país es profundo y demuestra cómo estamos políticamente, la falta de gobernabilidad predomina desde hace más de un año por la incapacidad de la figura del presidente de la república, quien con displicencia con cada una de sus actuaciones refleja el precitado: “¿de qué me hablas, viejo?”, pues no se quiere enterar, no le interesa, no le importa la cruel realidad del país, o sencillamente tiene miedo de coger las riendas:

Lo dijo un presidente muy poderoso en su discurso de posesión en Washington, 1961: “Los que insensatamente se entregaron a buscar el poder cabalgando a lomo de tigre, acabaron invariablemente por ser devorados por su cabalgadura”.

Entonces, señor Iván Duque Márquez, por si todavía le quedan dudas: De esto hablamos, viejo.

*Las opiniones expresadas en esta columna de opinión son de exclusiva responsabilidad de su autor y no reflejan, necesariamente, los puntos de vista de La Prensa Oriente

Compartir este artículo