Ángel David Agudelo asumió el cargo de rector de la Universidad Católica de Oriente (UCO) el 31 de enero, sucediendo a Elkin de Jesús Narváez Gómez. En este momento de transición, Monseñor Darío Gómez Zuluaga, quien estuvo al frente de la UCO durante años, ofreció tres consejos clave a Agudelo para asegurar el futuro de la Universidad, manteniendo su misión educativa al servicio del Oriente Antioqueño.
1. Evitar el endogenismo
Monseñor Gómez destacó la importancia de que la Universidad no se cierre en sí misma. “La universidad no debe mirarse solo a sí misma. Debe ser una universidad que escucha y responde a las necesidades de su región”, expresó. Este consejo resalta la necesidad de que la UCO siga siendo un puente entre la academia y la comunidad, con un enfoque siempre conectado al territorio.
2. Fomentar la colaboración y evitar la autosuficiencia
El segundo consejo fue claro: la Universidad debe estar abierta a colaborar con otras instituciones y actores de la región. “El aislamiento no es el camino. Necesitamos trabajar de la mano con otras universidades y entidades para avanzar”, afirmó Gómez. La idea es que la UCO no se convierta en una isla, sino en un referente educativo dispuesto a integrar saberes y recursos con otras organizaciones, fortaleciendo el tejido académico y social de la región.
3. Poner a la persona en el centro de la educación
El último consejo fue el más contundente: la misión educativa debe centrarse siempre en el estudiante y su desarrollo integral. “Lo que importa no es solo lo económico, sino la misión formativa. La universidad debe ser un espacio para el crecimiento humano de sus estudiantes”, indicó Gómez. Este llamado a priorizar a las personas sobre cualquier otro interés busca consolidar una educación que valore el potencial humano por encima de todo.
Por su parte, Ángel David Agudelo expresó su visión para la UCO. En su discurso, destacó que la Universidad debe continuar siendo accesible para los jóvenes del Oriente Antioqueño, en especial para aquellos de sectores vulnerables.
Mi compromiso es asegurar que más jóvenes, especialmente de familias de bajos recursos, tengan la oportunidad de estudiar aquí”, aseguró Agudelo.
Además, destacó sus planes de expansión hacia la educación virtual y la creación de nuevos programas académicos que sigan las necesidades de la región.
Con estos consejos de Monseñor Gómez y los planes trazados por Agudelo, la UCO se prepara para fortalecer su papel como institución educativa clave para el desarrollo del Oriente Antioqueño.