Desde 2020, la Empresa Colombiana de Cementos, a través de su marca ALIÓN, lidera un proyecto que impulsa la meliponicultura como una alternativa productiva y sostenible en el Magdalena Medio antioqueño. Lo que comenzó con 22 familias hoy alcanza a 44 hogares en los municipios de Sonsón y San Francisco, donde esta práctica tradicional comienza a consolidarse como una fuente de ingresos y conservación ambiental.
Formación técnica para la producción sostenible de miel
El proyecto se desarrolla con el apoyo técnico de Portafolio Verde, y se basa en la metodología de Escuelas de Campo para Meliponicultores (ECM). Esta incluye cinco módulos temáticos sobre el manejo técnico de colmenas, buenas prácticas ambientales y estrategias de comercialización. Además, incorpora visitas técnicas mensuales y acompañamiento virtual para garantizar la continuidad del proceso, incluso en zonas de difícil acceso.
Este proceso nos ha permitido acompañar a familias que, a través de la meliponicultura, hoy protegen la biodiversidad, conservan saberes tradicionales y construyen oportunidades en su propio territorio”, afirmó Pablo González, director Legal y de Sostenibilidad de ALIÓN.
Organización comunitaria y gobernanza participativa
Las familias están organizadas en tres núcleos territoriales:
- Veredas del corregimiento La Linda (Sonsón)
- Zonas rurales del corregimiento de Jerusalén (Sonsón)
- Sectores como Aquitania, La Cristalina y La Quiebra, en San Francisco y San Luis
Esta división permite adaptar los procesos formativos a las realidades sociales, geográficas y ambientales de cada zona.
El componente comunitario del proyecto busca fortalecer la organización colectiva. A través de un modelo de gobernanza participativa, las familias han comenzado a identificar liderazgos locales, definir reglas de funcionamiento, y construir un modelo asociativo que proyecte esta actividad productiva más allá del entorno familiar.
Lo más valioso ha sido ver cómo las familias se reconocen como colectivo, confían en sus capacidades y entienden que la meliponicultura puede ir mucho más allá de una actividad complementaria”, señaló Juan Esteban Vélez Osorio, director de la Oficina de Proyectos de Portafolio Verde.
Las abejas sin aguijón y su rol en la biodiversidad
En Colombia existen cerca de 120 especies de abejas sin aguijón, de las cuales al menos 35 se aprovechan para la producción de miel, según el Ministerio de Ambiente. Más allá de su valor comercial, estas abejas son polinizadoras clave, esenciales para la regeneración de ecosistemas, el cuidado de los bosques y el mejoramiento de cultivos.
Proyección del proyecto y expectativas a futuro
Actualmente, el proyecto se encuentra en fase de formación y asistencia técnica. Se espera que para el último trimestre del año, las familias participantes cuenten con:
- Meliponarios fortalecidos
- Conocimientos técnicos consolidados
- Herramientas para la toma de decisiones colectivas
El objetivo es que estas comunidades puedan comercializar sus productos y consolidar un modelo asociativo sostenible y adaptado a sus territorios.
ALIÓN continúa con el monitoreo en campo para evaluar el impacto del proyecto y su potencial de escalabilidad a largo plazo.
