De un viaje soñado a pesadilla, así fue la experiencia vivida por un grupo de cejeños que querían pasar varios días de vacaciones en el país azteca y terminaron de vuelta en un avión despúes de ser humillados por el personal de Migración.
Un grupo de 12 personas provenientes del municipio de La Ceja, vivió una experiencia traumática al llegar al Aeropuerto Internacional de Cancún, México, como parte de un viaje planeado de siete días. El itinerario incluía una estadía en Cancún, con el objetivo de disfrutar de los atractivos turísticos locales y conocer Isla Mujeres, antes de continuar su viaje hacia la Ciudad de México para explorar sus principales puntos históricos.
Sin embargo, al llegar a migración, el grupo fue retenido durante más de tres horas en una sala oscura, fría y con escasas comodidades. «Nos negaron la entrada de manera injusta, a pesar de que teníamos toda la documentación requerida», relató una de los miembros del grupo a La Prensa Oriente. Según su testimonio, las autoridades migratorias no solo rechazaron su ingreso, sino que además accedieron sin permiso a sus teléfonos móviles, violando su privacidad al revisar galerías de fotos, redes sociales y conversaciones de WhatsApp.
El grupo había planeado disfrutar de dos noches en Cancún, para luego trasladarse a la Ciudad de México, donde tenían previsto visitar la Capilla de la Guadalupana, las Pirámides de Teotihuacán y realizar un City Tour en bus de dos pisos para conocer la historia de la capital mexicana. Sin embargo, el viaje se vio truncado por la decisión de los oficiales de migración.
«El trato recibido fue completamente decepcionante. No solo se nos negó el acceso sin justificación, sino que también se vulneraron nuestros derechos como turistas», expresaron los afectados, quienes añadieron que el proceso de revisión fue invasivo y humillante. A pesar de contar con toda la documentación, incluso en formato digital en sus dispositivos móviles, los turistas no pudieron continuar con su plan de viaje.
La situación ha generado preocupación en el grupo y entre otros viajeros colombianos, quienes sugieren que, hasta que las autoridades migratorias mexicanas no mejoren sus protocolos y respeten los derechos de los visitantes, los viajes a este destino deberían reconsiderarse.
La Prensa Oriente le consultó a una de las afectadas acerca del trato del personal de Migración en Cancún, a lo que respondió: “uno de los vigilantes quizás el más empático nos decía que él mismo se preguntaba por qué si a nosotros se nos veía la pinta de turistas, cómo no nos habían dejado pasar”.
También recuerda que otro oficial de Migración les decía: “que no nos podíamos desviar, no podíamos ir al baño, no podíamos comprar nada. Yo le dije cuantas ilusiones se van acá y lo único de manera muy grotesca qué me dijo fue ‘súbase’ y ya”.
En los últimos días el presidente colombiano Gustavo Petro y la presidenta de México Claudia Sheinbaum acordaron fortalecer el intercambio de información para garantizar un trato digno a los colombianos, abordando la migración desde un enfoque de derechos humanos y solidaridad regional.
Según el diario El Nuevo Siglo Este acuerdo surge en respuesta a múltiples quejas documentadas por medios locales, donde viajeros colombianos relatan experiencias traumáticas al llegar a México. Las denuncias incluyen detenciones arbitrarias, confiscación de pasaportes y teléfonos, así como la imposibilidad de comunicarse con familiares o recibir asistencia consular.
En el comunicado conjunto emitido tras la reunión, ambos gobiernos se comprometieron a implementar varias medidas. Entre ellas se destaca el derecho de los viajeros colombianos a comunicarse con sus familias y con el consulado en caso de inadmisión. Además, se garantizará que reciban una copia del acta que explique los motivos de su inadmisión.
