José Ilder Osorio Montoya
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Ubicado en el suroriente de Antioquia, el municipio de Argelia conmemora 134 años de su fundación, un hito que refleja su evolución histórica, cultural y social. Aunque su origen se remonta a 1867, cuando fue fundado por el reconocido poeta Gregorio Gutiérrez González, fue a partir de 1891 cuando comenzó a consolidarse como un poblado y posteriormente como un territorio reconocido. Hoy, Argelia se erige como un espacio emblemático en la región, marcado por su riqueza hídrica, su tradición arriera y su vibrante cultura.
En el marco de esta celebración, los eventos centrales tuvieron lugar el pasado 10 de marzo en la plaza principal, donde se dieron cita instituciones, personalidades y la comunidad en general. La conmemoración contó con la participación de los Vigías del Patrimonio de Antioquia, la Red de Vigías del Patrimonio para América Latina y el Caribe (CONFIA), representantes del Centro de Historia de Envigado y la Sociedad de Mejoras Públicas de Envigado. Durante el acto, se rindió un emotivo homenaje al maestro, poeta y compositor argelino Jesús Antonio Aristizábal Serna, quien estuvo presente en el evento. Además, se realizó la entrega de la partitura del himno municipal y su nueva versión en voz soprano, interpretada por el Centro de Historia de Argelia de María, bajo la dirección del doctor Alonso Gómez, presidente de la corporación y primer personero municipal.
Argelia, un municipio que contrasta con la expansión de las grandes urbes, conserva una identidad arraigada en la tradición arriera. Esta actividad, que sigue siendo fundamental para la economía local, permite el transporte de productos agrícolas, mercancías y personas a través de las escarpadas rutas montañosas de la región. La arriería no solo fortalece el comercio, sino que también conecta a Argelia con las zonas rurales aledañas. Precisamente, esta tradición se ve reflejada en las emblemáticas Fiestas de la Mula, que este año prometen ser un evento de gran relevancia para la comunidad.
La celebración del aniversario también sirvió como escenario para la inauguración de un parque completamente remodelado, un regalo para la comunidad que transformará la cotidianidad del municipio. Este espacio, diseñado para fomentar la convivencia y el desarrollo cultural, deportivo y recreativo, se convierte en un punto de encuentro para niños, jóvenes y adultos, fortaleciendo el tejido social y promoviendo el uso adecuado del tiempo libre.
En síntesis, Argelia vivió una jornada cargada de emotividad y orgullo. Con desfiles, actos culturales y la presencia de diversas instituciones, sus habitantes ratificaron su amor por este terruño, que sigue escribiendo su historia con esperanza y mirando hacia un futuro lleno de progreso. La unión de su gente y la preservación de sus tradiciones son el legado que perdura en este rincón del suroriente antioqueño.