Este lunes inició la segunda intervención al cementerio Panteón de la Colina en el municipio de Rionegro por parte de la Unidad de Búsqueda de Personas Desaparecidas con la que se pretende dar con por lo menos 30 cuerpos de personas víctimas del conflicto armado.
Durante el evento, La Prensa tuvo la oportunidad de conocer la historia de don Hermes de Jesús Manrique Muñoz y su esposa, habitantes de la vereda El Rodeo de Sonsón que vieron como hace 22 años su hijo, un joven de tan solo 14 años fue reclutado por el frente 47 de las FARC y posteriormente desaparecido.
Hermes de Jesús Manrique Ocampo, en 2002 tenía 14 años, el día que desapareció le restaban 15 días para los 15 años de edad. Aquel día salió de su casa como era constumbre y su familia nunca más volvió a saber de él.
“Ha sido muy duro ya cuando nosotros empezamos a averiguar por él durante todo ese resto de año, pero no pude seguirlo buscando porque los paracos se dieron cuenta que al hijo mío se lo habían llevado y me reunieron a decirme que si seguía colaborando con la guerrilla no nos convenía quedarnos por allá y nos tuvimos que venir para Rionegro”. Asegura don Hermes al afirmar que colaboraba con la guerrilla pero por miedo debido a las constantes intimidaciones.
Desplazados por la violencia y con el dolor y la zozobra de tener a su hijo mayor desaparecido, tuvieron que salir con lo que tenían puesto y marcharse para Rionegro donde intentaron rehacer su vida.
Durante la primera intervención que realizó la UBPD en el cementerio de Rionegro en marzo del 2024, don Hermes fue hasta el camposanto pero esa búsqueda fue infructuosa para él y su familia pues no se dio con el cuerpo de su hijo.
Ahora que comienza una nueva etapa de búsqueda, sus esperanzas están puestas en que con una prueba de ADN se pueda ayudar a dar con el paradero de su hijo que si hoy viviera tendría 36 años.
“Es un sufrimiento muy horrible el que hemos pasado por 22 años. Lo único que anhelamos es que nos entreguen a nuestro hijo para poderle dar cristiana sepultura. Así nosotros tambien descasaremos”.
Como esta historia hay miles, familias que quedaron destrozadas por la desaparición de sus familiares y que con esta intervención al cementerio de Rionegro, quieren pasar página. Eso sí, habiendo sabido el paradero de los suyos.
El cementerio Panteón de la Colina en Rionegro tiene un universo de por lo menos 152 personas desaparecidas de toda la región, lo que lo convierte en el camposanto con mas víctimas del conflicto armado en toda la subregión del Oriente.
