La Comisión de Ordenamiento Territorial del Senado aprobó el concepto que permite avanzar en la conformación del Área Metropolitana del Valle de San Nicolás, una iniciativa que busca integrar a ocho municipios del Oriente Antioqueño: El Retiro, La Ceja, La Unión, Rionegro, El Carmen de Viboral, El Santuario, Guarne y San Vicente.
Durante el debate, la senadora Isabel Zuleta manifestó su rechazo a la creación del área metropolitana, argumentando que este modelo podría generar una concentración excesiva de poder en Rionegro, replicando lo ocurrido con el Área Metropolitana del Valle de Aburrá y Medellín.
No podemos permitir que Rionegro concentre las decisiones en el territorio, como ocurrió en el Valle de Aburrá con Medellín. Los municipios pequeños también tienen derecho a opinar. Ellos aportan la comida, el agua y la energía, pero no reciben los beneficios que deberían. Un modelo de integración debe ser equilibrado”, afirmó Zuleta.
Según la senadora, la preocupación no radica únicamente en la integración territorial, sino en el riesgo de centralización y monopolio de decisiones en detrimento de los municipios más pequeños.
En Antioquia hemos tenido modelos centralistas que olvidan a los que estamos en las subregiones y zonas alejadas”, advirtió.
En este sentido, enfatizó que la figura de la Provincia Administrativa y de Planificación (PAP) sería una opción más justa para integrar el territorio sin afectar la autonomía de los municipios.
Frente a estas declaraciones, el representante Hernán Cadavid, defendió la necesidad de avanzar en la consulta popular para que sean los ciudadanos quienes decidan.
El debate no es sobre centralismo o no centralismo, porque si esa fuera la razón, no le hubieran retirado la delegación minera al departamento de Antioquia”, señaló.
Cadavid recordó que, si bien la figura de provincia es el mecanismo de asociatividad previsto en la ley para municipios más alejados, en este caso los hechos metropolitanos ya existen y han sido expuestos por los alcaldes y concejos municipales.
En sesiones anteriores, varios mandatarios locales argumentaron que la conformación del Área Metropolitana del Valle de San Nicolás permitiría atender de manera conjunta problemáticas en planeación, movilidad, salud, seguridad, infraestructura y acceso a mayores recursos para municipios con menor capacidad fiscal.
Las dinámicas del territorio han cambiado considerablemente en términos de población, ingresos, planificación, transporte y medio ambiente. No se trata solo de un debate político, sino de una discusión sobre la necesidad de garantizar herramientas que permitan una mejor gestión del desarrollo regional. Lo que veo en algunos sectores es una oposición basada en posturas ideológicas, cuando en realidad este es un trámite legítimo que simplemente busca darle la voz a la ciudadanía para que decida en las urnas”, afirmó el representante Cadavid.
Asimismo reiteró que este tema ha sido ampliamente discutido en el territorio y que la mejor manera de resolver las diferencias es a través de la votación popular.
Que hay contradicciones, resolvámoslas en las urnas, en la consulta, en los foros de la subregión, pero no impidamos un instrumento de concurrencia de la ciudadanía”, concluyó.
De acuerdo con la normativa, una vez la Cámara de Representantes apruebe el concepto, la Registraduría dispondrá de 10 días para definir si se convoca a una consulta popular en cada municipio. Para que un territorio se adhiera al Área Metropolitana, al menos el 5 % del censo electoral debe participar en la votación y la mayoría de los sufragios debe ser afirmativa.
El debate continúa con miras a definir el futuro de la planificación y desarrollo conjunto del Altiplano del Oriente Antioqueño, en medio de tensiones entre quienes defienden el modelo metropolitano y quienes consideran que la provincia es la mejor opción para garantizar una integración más equitativa.
