Por: Nelson Enrique Restrepo Ramírez. Sociólogo U de A, Máster en Ordenación y Gestión del Desarrollo Territorial y Local U de Sevilla. Integrante de la Corporación Conciudadanía.
Porque según su POT, Rionegro duplicará su población en el 2041, en el 2045 tendrá casi trescientos mil habitantes; prevé un crecimiento urbano tan acelerado como el que ha ocurrido en los dos últimos censos.
Porque Rionegro se extenderá hacia Marinilla, Guarne, El Retiro, La Ceja, El Carmen y eso significa necesidad de acuerdos con ellos para diseñar una nueva ciudad. Por eso la primera necesidad de Rionegro es la planificación y ordenamiento del suelo urbanizable, porque inevitablemente se urbanizará más y al hacerlo, impactará a sus vecinos.
Esta ciudad imaginada requiere otra movilidad. Por eso Rionegro propone un sistema de transporte masivo, “un tren ligero útil para el próximo siglo, parte integral de Sonrío, con conexión al aeropuerto” y la futura estación del Metro del Aburrá. Por eso requiere una terminal de transportes regional de pasajeros, acordada con sus vecinos, y por eso la actual propuesta de paraderos satélites de Sonrío son inútiles y en todo caso provisionales. Rionegro requiere del área porque ésta sería autoridad de transporte y Rionegro podría aprovechar su posición dominante para aprobar Sonrío.
Se sabe que Aguas de Rionegro no está en capacidad de abastecer a la población actual y sobre todo a la futura; que para hacerlo debe ir por el agua más lejos, aumentar la capacidad de las infraestructuras de acueducto y alcantarillado (porque el agua que entra, sale). Por eso la vendió a EPM, quien sí está en capacidad de invertir más de medio billón de pesos que se requiere para esto (por ahora) y se proyecta como la empresa de servicios públicos de la metrópoli regional. El Rionegro de ahora y sobre todo el del futuro, también requiere de un relleno sanitario, un sistema moderno de aprovechamiento de residuos sólidos y sus vecinos también lo necesitan.
Es claro que Rionegro y sus vecinos necesitan un área metropolitana o una figura administrativa y de planificación (que también podría ser una provincia repotenciada en comparación con las actuales) para planificar el suelo urbanizable, la movilidad supramunicipal y los servicios públicos.
Dicho esto, ¿por qué están en la propuesta de Área Metropolitana del Oriente Antioqueño, municipios como San Rafael, Concepción, Granada, Abejorral, que son rurales en esencia y están más lejos de la influencia de la metrópoli regional?
Están propuestos porque Rionegro y sus vecinos necesitan sus aguas, ya EPM usa el río Buey (que discurre entre Abejorral y La Unión y viene del páramo de Sonsón) para abastecer al Aburrá sur y en el futuro cercano a Rionegro; EPM también va a requerir las aguas del El Carmen de Viboral y seguramente las de Cocorná (ríos Santo Domingo y Melcocho). Ni en Llano Grande, ni en Guarne, El Retiro o Guatapé van permitir un relleno sanitario. ¿Dónde lo van a poner, en Concepción, San Rafael o en Granada? ¿Para eso necesita Rionegro a estos municipios en el área metropolitana? Es necesario andar con claridades con estos municipios, hablarles con la verdad. Parte esencial en estos temas es lo que se llaman cargas y beneficios y está bien preguntarse: qué cargas asumen los municipios rurales por asociarse con Rionegro? Porque todo indica que ellos no necesitan el área, mientras Rionegro, sí.
*Las opiniones expresadas en esta columna de opinión son de exclusiva responsabilidad de su autor y no reflejan, necesariamente, los puntos de vista de La Prensa Oriente